martes, 31 de enero de 2012

Panificadora

La panificadora es una máquina complementaria en la cocina.

Ella amasada, controla los levados y la temperatura. Es muy cómoda.

Los tiempos son tiempos reales. Hay programas que duran 2 horas, otros 3... pero le pones los ingredientes, la programas y punto.


Se le puede agregar frutos secos, chocolate, semillas, especies, quesos... Lo que a uno se le pase por la mente.

Además de pan, también se pueden hacer mermeladas y bizcochos. Sé de compañeras que han hecho arroz con leche y alguna que otra cosita. 

Es un cacharro de dimensiones considerables, la verdad. Y, en mi caso, no la tengo de uso diario, más bien una vez por semana, tal vez dos si hago empanada o pizza. Así que la tengo guardada y en cada uso la saco a la luz. (Esto es un poco engorroso, pero como son pocas veces, se lleva bien).

Tengo que reconocer que ahora le doy muy poco uso porque antes, sobretodo hacía pan para el desayuno, pero ahora llevo ayuno así que prácticamente no la utilizo.

Además, con la thermomix, que también amasa... poco partido ya le saco. Pero si teneis niños, os servirá de mucho, para hacer pan, panecillos, o solamente amasar para después hacerles cualquier merienda.

Los panes de la panificadora son panes de miga fuerte, compacta, pero con la corteza muy suave. Como si fuese corteza de bollería.

Para mi gusto, se comen mucho mejor tostados. Y para desayunar con mantequilla y mermelada, están de vicio.





En mi caso, hacía el pan, cortaba la mitad a rodajas y éstas las introducía en una bolsa y las congelaba.
Cuando lo necesitaba, sacaba lo justo, al micro a descongelar y a tostar. Y quedaba delicioso.

Pensad que un pan os aguantará tierno unos 4 días, más o menos. Y para nosotros que somos dos, era mucho pan para consumir en tan pocos días.

El modelo que tengo en casa es la panificadora del Lidl (silvercrest).

Calidad-precio, esta máquina en concreto, esta marca me refiero, sale estupenda. Nada que envidiar a cualquier otra, y el precio es asequible. Me costó en 2011, 39 euros.

Recomendable?

Hay que sopesar muy mucho el uso que le vas a dar. Ahora, con la thermomix y el poco pan que hago en casa, ya no me la compraría. Pero en su día, le hice mucho uso y estoy convencida que volveré a trabajar con ella más adelante. En otra etapa de mi vida.
También hay que tener en cuenta el espacio. Es grande y pesa. Es imprescindible que tener claro un sitio para ella.

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